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Public Health

Gestión de crisis

Las enfermedades infecciosas pueden propagarse rápidamente si no se toman medidas a tiempo. En caso de brote transfronterizo, la respuesta debe ser rápida, específica y coordinada. Del mismo modo, las amenazas químicas o las catástrofes medioambientales (por ejemplo, las erupciones volcánicas) pueden traspasar rápidamente las fronteras de un país o sobrecargar las capacidades nacionales de respuesta.

El papel de la UE en la gestión de las crisis sanitarias consiste principalmente en garantizar la coordinación de la respuesta, si bien las medidas específicas de salud pública siguen siendo responsabilidad de los gobiernos nacionales, teniendo en cuenta factores como la situación epidemiológica nacional, la estructura social y la capacidad del sistema sanitario nacional.

La Comisión trabaja en estrecha colaboración con todos los países de la UE para garantizar una respuesta coherente y bien coordinada. La Comisión también puede movilizar instrumentos a escala de la UE de apoyo directo a los Estados miembros, como la contratación pública conjunta.

La última pandemia de COVID-19 es una grave crisis sanitaria que requiere una amplia acción coordinada a escala de la UE. Un ejemplo previo de esta coordinación fue la actuación de la UE en el brote de ébola en África Occidental.

Comité de Seguridad Sanitaria

La respuesta rápida de la UE a las amenazas transfronterizas graves para la salud se coordina a través del Comité de Seguridad Sanitaria. Es un foro clave para el intercambio de información sobre las medidas específicas adoptadas por cada país y, junto con la Comisión Europea, define las acciones que deben emprenderse en materia de preparación, planificación, comunicación de riesgos y crisis, y respuesta.

El Comité está compuesto por representantes de las autoridades sanitarias de los países de la UE y en él participan los países candidatos y candidatos potenciales en calidad de observadores. En concreto, a las reuniones del Comité sobre la COVID-19 se invita a países como el Reino Unido, Suiza y Ucrania para reforzar la cooperación.

El Comité se reúne a intervalos regulares y cuando la situación lo requiere, a petición de la Comisión o de un país miembro de la UE. Lo preside la Comisión. El Comité ha celebrado reuniones frecuentes desde el inicio de la pandemia de COVID-19.

Cuando un país de la UE tiene la intención de adoptar medidas de salud pública para luchar contra una amenaza transfronteriza grave, debe informar a los demás países de la UE y a la Comisión Europea sobre la naturaleza, la finalidad y el alcance de las medidas antes de su adopción, salvo que la necesidad de proteger la salud pública haga necesaria la adopción inmediata.

Los representantes de los servicios nacionales de salud consultan en el seno del Comité de Seguridad Sanitaria en colaboración con la Comisión Europea para coordinar:

  • las respuestas nacionales frente a las amenazas transfronterizas graves para la salud
  • la comunicación de riesgos y crisis al público y a los profesionales de la sanidad de la UE, que puede adaptarse a las necesidades y circunstancias nacionales.

En caso de que se produzca una amenaza grave para la salud que supere las capacidades de respuesta nacionales, el Estado miembro afectado también puede pedir ayuda a otros países de la UE a través del Mecanismo de Protección Civil de la Unión.

Procedimientos farmacéuticos durante una amenaza pandémica

En caso de amenaza pandémica o de amenaza muy grave que ponga en peligro la salud pública en la Unión Europea, la Comisión Europea puede declarar una situación de emergencia de salud pública que desencadene disposiciones especiales de la legislación farmacéutica de la UE para obtener rápidamente una autorización de comercialización de medicamentos. Asimismo, la Comisión puede examinar la conveniencia de un procedimiento acelerado para la autorización rápida de vacunas contra la gripe pandémica.

La Comisión también está en contacto permanente con socios clave como el Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC), la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) y la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Comunicación de riesgos y crisis

La claridad y la eficacia de la información y la comunicación al público y los profesionales de la salud constituyen una parte fundamental de la respuesta a las crisis a escala nacional.

La UE apoya a los Estados miembros en su comunicación de riesgos en caso de brotes, pero no impone mensajes armonizados. El papel de la Comisión es, más bien, garantizar la coordinación entre los Estados miembros para que la comunicación al público y a los profesionales de la salud sea coherente.

Red de comunicadores

El Comité de Seguridad Sanitaria estableció la red de comunicadores, un grupo en el que participan expertos en gestión de riesgos de los países de la UE, la Comisión y las agencias de la UE, que toma la iniciativa en los aspectos comunicativos de las crisis sanitarias.

Esta red facilita la cooperación:

  • durante la crisis, al simplificar el intercambio de información desde el principio y coordinar las estrategias nacionales y los mensajes dirigidos al público para asegurarse de que sean coherentes sin dejar de estar adaptados a las circunstancias nacionales
  • a largo plazo, al promover el intercambio de las mejores prácticas de comunicación en caso de crisis y riesgos sanitarios y formular recomendaciones sobre medidas preventivas.

Grupo de trabajo técnico sobre pruebas de diagnóstico para la COVID-19

En el contexto de la pandemia de COVID-19, el Comité de Seguridad Sanitaria creó, en mayo de 2021, un Grupo de trabajo técnico sobre pruebas de diagnóstico para la COVID-19 con expertos de los 27 países de la UE y Noruega, así como representantes de la Dirección General de Salud y Seguridad Alimentaria, del Centro Común de Investigación y del Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC).

El grupo de trabajo técnico debatirá, en particular,

  • las propuestas de actualización de la lista común de pruebas rápidas de antígenos de la UE, que deberán ser aprobadas por el Comité de Seguridad Sanitaria
  • un protocolo armonizado, que incluirá criterios comunes, para estudios de validación independientes que evalúen el rendimiento clínico de las pruebas rápidas de antígenos.

Encontrará más información al respecto en el apartado del grupo de trabajo técnico y sus actividades.