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Public Health

La necesidad de primates no humanos en la investigación biomédica, la producción y los ensayos de productos y aparatos (actualización de 2017)

En investigación médica se utilizan primates no humanos por sus similitudes con los seres humanos. Los resultados de la investigación sobre primates pueden a menudo aplicarse a los humanos, lo que ha permitido a los científicos aprender mucho sobre enfermedades, afecciones, prevención y tratamientos, tanto para los humanos como para los animales. Sin embargo, utilizar animales tan similares a los humanos suscita graves preocupaciones éticas. De ahí que la utilización de primates no humanos esté sujeta a estrictos controles y reglamentaciones. La experimentación con animales para fines de elaboración de cosméticos está totalmente prohibida en la Unión Europea desde marzo de 2013, y mucho se ha hecho para proteger concretamente a los primates no humanos: por ejemplo, los primates no humanos utilizados para fines de investigación no pueden ser salvajes, salvo en caso de que los objetivos del estudio requieran específicamente utilizar primates salvajes capturados, y está prohibido utilizar grandes simios. En la medida en que sigan utilizándose primates no humanos para fines de investigación médica, la Comisión Europea defiende firmemente aplicar el "principio de las tres erres", consagrado hoy en día como obligación legal en la legislación de la UE: reemplazar cuando sea posible los primates no humanos por alternativas viables, reducir el uso de primates no humanos y refinar los procedimientos científicos y el cuidado y tratamiento de los animales. El presente Dictamen es una actualización del Dictamen de 2009 y aborda cuestiones específicamente relacionadas con la aplicación del "principio de las tres erres".

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7. Consecuencias de una prohibición en la UE de la utilización de primates no humanos

7.1 ¿Qué consecuencias potenciales tendría para la investigación biomédica prohibir el uso de primates no humanos?

En la medida en que no se dispone de alternativas suficientemente validadas, una prohibición total impediría, al menos en Europa, seguir avanzando en algunos ámbitos de investigación, así como la realización algunos estudios de seguridad. No obstante, en caso de que se impusiera una prohibición total, la investigación con primates no humanos se vería obligada a abandonar Europa y a trasladarse a países en los que las normas de bienestar animal de los primates no humanos de laboratorio son, en general, menos exigentes que las de la Unión Europea. Probablemente se produciría una disminución neta de bienestar animal, lo que puede afectar a la calidad de la investigación, la salud pública, la accesibilidad de los tratamientos desarrollados con normas distintas y a la economía interior.

7.2 La utilización adecuada de primates sigue siendo fundamental en algunos ámbitos de la investigación

La prohibición total aún no es posible, en la medida en que no se disponga de alternativas suficientemente validadas. Existe consenso en algunas partes de la comunidad científica en el sentido de que, cuando no existan alternativas adecuadas, la utilización adecuada de primates sigue siendo fundamental en algunos ámbitos de la investigación biomédica y biológica y para la evaluación de la seguridad de los productos farmacéuticos. Por ejemplo: a la hora de evaluar la eficacia y la seguridad, especialmente de los compuestos biofarmacéuticos, los primates no humanos pueden desempeñar un papel clave en el desarrollo de medicamentos, debido a la similitud de sus órganos sensoriales, sistemas hormonales, reproductivo, inmunitario, etc., con los de los seres humanos. Se ha avanzado en favor de un planteamiento no animal, predictivo y basado en mecanismos, p. ej. para las pruebas de toxicidad reproductiva de los medicamentos, pero siguen existiendo obstáculos que superar en términos de aceptación reglamentaria y validez científica.

Dado que las normas de bienestar animal de los primates no humanos de laboratorio son, por término medio, más exigentes en muchos países europeos que en otras partes del mundo, si la investigación con primates no humanos se ve obligada a trasladarse fuera de Europa debido a una prohibición de la utilización de primates no humanos, probablemente se produciría una disminución neta de bienestar animal, si bien algunas empresas han desarrollado normas de bienestar animal a escala mundial. Existe la preocupación de que los científicos europeos transfieran sus programas de investigación fuera de la Unión Europea, a países en los que las normas científicas y de bienestar serían consideradas inaceptables desde el punto de vista ético en Europa, lo que puede afectar a la calidad de la investigación, la salud pública, la accesibilidad de los tratamientos desarrollados con normas distintas y a la economía interior.

En la medida en que una prohibición total no sea viable, a la hora de comunicar con el público sobre la utilización de primates no humanos, la comunidad científica debe ofrecer una descripción adecuada de los daños y beneficios para los animales y las limitaciones de la propia investigación, además de ser realistas sobre los resultados e impactos potenciales.