Ir al contenido principal
Public Health

Aunque los trasplantes son cada vez más frecuentes como tratamiento médico, la escasez de órganos disponibles sigue siendo el principal factor que limita su aplicación.

Los trasplantes de riñón para enfermos renales en fase terminal son los más habituales. Otros órganos que se trasplantan con frecuencia son el hígado, los pulmones y el corazón. También pueden ser trasplantados el intestino delgado y el páncreas. Además, continuamente surgen nuevos tipos de trasplantes.

Todos los órganos pueden donarse después de la muerte. Por otra parte, los donantes vivos pueden ceder un riñón o una parte de su hígado.

La Comisión Europea financia acciones en el ámbito de las sustancias de origen humano, principalmente a través de proyectos o acciones conjuntas con las autoridades nacionales. Las acciones tienen por objeto apoyar el mandato de la UE en materia de seguridad y calidad, pero también pueden servir para fomentar otras prioridades programáticas, como la mejora de la disponibilidad de las SoHO o la eficiencia de los sistemas de salud que apoyan la donación y el suministro.

La Comisión Europea ha apoyado a las autoridades nacionales competentes facilitando el intercambio de información entre ellas, incluidas las orientaciones del Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC), en particular durante la crisis de la COVID-19. La Comisión Europea tiene previsto llevar a cabo nuevas acciones de la Unión para seguir apoyando al sector de las órganos, principalmente en dos dimensiones:

  1. Apoyando a los países de la UE y cumpliendo con la obligación de notificación establecida en la Directiva.
  2. Apoyando al sector a través de subvenciones en el marco de EU4Health y apoyo financiero a organismos especializados.
     
Infographic - Organs

Legislación

El marco jurídico que define las normas aplicables a los trasplantes de órganos se establece en la Directiva 2010/53/UE, también conocida como Directiva sobre órganos.

La Directiva sienta las normas de calidad y seguridad aplicables a los órganos y abarca todas las etapas del proceso de trasplante: donación, obtención, evaluación, manipulación y distribución.

Para facilitar la aplicación de este texto principal, la Comisión propuso y adoptó, en estrecha colaboración con las autoridades nacionales de la UE, la Directiva de ejecución 2012/25/UE de la Comisión por la que se establecen los procedimientos de información para el intercambio entre Estados miembros de órganos humanos destinados al trasplante.

La propuesta de Directiva sobre órganos que hizo la Comisión iba acompañada de una evaluación de impacto. Las bases de la legislación actual se establecen en la Resolución 2007/2210, las Conclusiones del Consejo 15332/07 SAN sobre la donación y el trasplante de órganos, la Comunicación de la Comisión COM(2007) 275 final y la consulta sobre donación de órganos y transparencia.

Directrices

La Comisión Europea colabora estrechamente con órganos especializados como el Consejo de Europa y el Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades en la elaboración de directrices prácticas que faciliten la aplicación de este marco legislativo vinculante en las organizaciones de obtención y los centros de trasplante.

Coordinación y aplicación

Las autoridades competentes nacionales son responsables de la aplicación de los requisitos que establece la legislación de la UE. La Comisión Europea organiza reuniones periódicas con ellas para facilitar la comunicación y el intercambio de buenas prácticas y llegar a un entendimiento común sobre la aplicación de las Directivas.

Las encuestas periódicas, a cargo de las autoridades competentes, permiten a la Comisión Europea elaborar informes sobre el estado en que se encuentra la aplicación de la legislación.

En ocasiones, las autoridades competentes nacionales de la UE adoptan una declaración sobre un tema de interés o una preocupación común:

Plan de acción

El «Plan de acción sobre donación y trasplante de órganos (2009-2015): cooperación reforzada entre los Estados miembros» asiste a los países de la UE a la hora de abordar la escasez de órganos, perfeccionar los sistemas de trasplante y mejorar la calidad y la seguridad de los productos para trasplantes. En él se fijó un rumbo compartido para que los Estados miembros reforzasen sus actividades nacionales de trasplante y se sentaron las bases para muchas acciones financiadas por la UE. Durante su periodo de aplicación, de 2009 a 2015, los países de la UE incrementaron sus actividades en 4 600 trasplantes adicionales al año.